Los días 6, 7 y 8 de marzo hemos participado, junto con Saraiva y Activiza, en el IV Congreso Nacional de Dependencia y Sanidad organizado por Alimarket en Madrid. Muchos/as de los/as profesionales que os acercasteis a conocernos regresasteis a las organizaciones donde trabajáis con un regalo muy especial: Las Cartas Conversacionales de Envita. Hemos volcado todo nuestro cariño en el diseño de estas cartas con el objetivo de fomentar conversaciones significativas entre personas mayores, profesionales, familiares y/o personas voluntarias para conectar y conocerse mejor.
Entre los/as asistentes al evento, se encontraban profesionales de Tercera Actividad León, donde ya han podido disfrutar de este nuevo recurso. Por ello, hemos querido entrevistar a Natalia, educadora social que ha llevado a cabo una actividad intergeneracional en el centro Tercera Actividad junto con Casa Escuela Santiago
Gracias por brindarnos tu tiempo Natalia, nos parece muy bonito que hayáis elegido Las Cartas Conversacionales como recurso de apoyo en un encuentro intergeneracional.
Gracias a vosotros/as estoy encantada de responder a todas vuestras preguntas, ya que Las Cartas Conversacionales han sido un gran descubrimiento para las actividades que desarrollamos desde el centro con las personas que acompañamos.
Desde Envita diseñamos recursos que facilitan el impulso de la ACP en las organizaciones y promueven la creación de actividades intergeneracionales ¿Cómo surge vuestra actividad?
Desde Tercera Actividad León llevamos a cabo cada jueves una actividad llamada “Café Coloquio” con los/as residentes. Se nos ocurrió invitar a esta actividad semanal a jóvenes de Casa Escuela Santiago Cuatro para iniciar un espacio intergeneracional, con el objetivo de eliminar prejuicios y estereotipos asociados a la edad. Una de nuestras compañeras trajo al centro vuestras Cartas Conversacionales, ya que coincidió con vosotros/as en el IV Congreso de Sanidad y Dependencia de Alimarket. Las vi y supe que era un recurso muy útil para incluir en la sesión del jueves.
Los/as participantes de la sesión, ¿Ya se conocían?
No. Era el primer encuentro intergeneracional, por este motivo Las Cartas Conversacionales nos sirvieron como apoyo para romper el hielo entre ellos/as. Antes de empezar con las conversaciones realizamos una dinámica de presentación. Se dividieron por parejas, de esta forma, cada joven charló un poco con una de las personas mayores que residen aquí. Esa acción, sumada a la utilización de Las Cartas Conversacionales, facilitó mucho la fluidez con la que se desarrolló la sesión.
¿Cómo utilizaste Las Cartas Conversacionales para la realización de la actividad?
Hice una selección previa. Me centré en las cartas relativas a la etapa del presente porque creo que son ideales para un primer acercamiento, para conocer cuáles son los gustos, intereses y aficiones de una persona. Seleccioné también alguna carta representativa de la etapa del pasado. Descarté el resto porque eran preguntas que necesitaban una relación ya establecida o un nivel de vínculo anterior.
Barajamos las cartas seleccionadas y repartimos el mazo al azar. Cada persona respondió la pregunta de la carta que le tocó. Las cartas representativas del presente nos ayudaron a hablar de cómo son las personas hoy en día, tanto los/as jóvenes como las personas mayores, y las del pasado propiciaron que habláramos de cambios sociales, es decir, de cómo era antes las cosas y cómo son ahora, por ejemplo, con relación al rol de las mujeres en la sociedad.
¿Qué funcionó?
Creo que Las Cartas Conversacionales ayudaron, sobre todo, a guiar el diálogo en la actividad. Los/as jóvenes no están muy acostumbrados/as a este tipo de espacios y al principio se sintieron un poco cohibidos/as, pero esa sensación fue disminuyendo rápidamente a medida que iban saliendo diferentes preguntas del mazo de cartas.
Yo tenía miedo a que la actividad tuviera momentos de tensión, porque a veces cuando quieres hablar de temas importantes, las conversaciones pueden tomar un rumbo que muchas veces no sabes cómo reconducir. Pueden salir a relucir temas sensibles o, todo lo contrario, se pueden generar silencios incómodos. Las Cartas Conversacionales nos ayudaron a guiar la sesión en todo momento sin este tipo de contratiempos, permitiendo que las experiencias y recuerdos compartidos fueran agradables para todos/as.
¿Utilizasteis alguna carta de la etapa “futuro”?
¡Sí! Utilizamos la carta: ¿Qué le dirías a tu “yo” del futuro? Fue muy bonito lo que ocurrió con esa pregunta. Uno de los jóvenes contó al grupo que de mayor quería ser educador social especializado en el apoyo y acompañamiento a niños/as y jóvenes. Estaba convencido que su “yo” del futuro se acordaría de su actual educador, que es su fuente de inspiración. Hablaba de cómo su “yo” futuro había conseguido su sueño, ser educador y ayudar a otros/as jóvenes.
Como profesional, ¿Qué fue lo que más te gustó del recurso?
Me gustó mucho la estética, pero es que, además de bonitas, las cartas también me resultaron muy sencillas de utilizar. Son simples y muy concretas. Pienso que facilita mucho el trabajo el hecho de que estén divididas en tres etapas vitales: pasado, presente y futuro. Esta división temporal ayuda a diseñar diferentes actividades, dependiendo de los objetivos de trabajo de cada sesión. En esta en concreto, también me gustó mucho la forma en la que ayudó a generar un clima agradable y acogedor para todos/as los/as participantes.
¿Vais a seguir utilizando el recurso en el centro?
Sí, seguiremos utilizándolas para aprovechar ratitos con las personas que acompañamos, para conocerlas mejor. Desde el centro, además, participamos en una iniciativa para combatir la soledad no deseada, dirigida a personas mayores de 65 años en 4 localidades de nuestro municipio. Ya he pensado cómo utilizarlas en un par de sesiones de este proyecto en el que participaremos.
¿Cuál fue el momento más especial que vivisteis en la actividad?
Me quedaría con los momentos que vivimos gracias a la pregunta al “yo” del futuro porque esa carta, a su vez, también propició que las personas mayores dieran consejos a los/as jóvenes. Recordando sus experiencias vitales pasadas, les recomendaron que lucharan por sus sueños. Contaron todas las dificultades que ellos/as también tuvieron que atravesar, como la guerra, la posguerra y algunas situaciones personales muy duras. Les recomendaron que persiguieran sus objetivos sin perder la ilusión. Fue muy bonito.
Gracias nuevamente por este ratito que nos has ofrecido Natalia, ha sido muy interesante conocer tu experiencia con nuestro nuevo recurso.
Gracias a vosotros/as por diseñar y crear recursos tan funcionales para los/as profesionales que acompañamos a personas, porque facilitan actividades, conversaciones y momentos muy necesarios.
Y tú, ¿Te animas a probar Las Cartas Conversacionales? Con ellas podrás conocer mejor a las personas que acompañas y, de paso, hacer una actividad diferente con la que crear momentos especiales. ¡Estamos deseando conocer tu experiencia!